francisco come con rabinos

 

El pasado jueves se reunió con 15 dirigentes de la comunidad judía argentina, quienes pudieron disfrutar de una comida kosher y cantar en hebreo en la mismísima residencia de Santa Marta, en el Vaticano.

Los 15 rabinos quedaron sencillamente maravillados. El Sumo Pontífice los recibió como a sus "hermanos" y convirtió un almuerzo en un momento "histórico". Una simple mesa simbolizó un hito en la historia del diálogo interreligioso.

"Ya nada será igual. Dentro de lo que es mi vida es algo inolvidable", manifestó a la Agencia Judía de Noticias el presidente de una entidad judía que participó de la reunión. "Tiene una trascendencia mundial la presencia de la comunidad judía con el Papa."

"Hine ma tov umá naím shébet ajim gam iájad" fue la canción que entonaron junto al Papa, una de las canciones más significativas para el pueblo judío: el fragmento de un salmo que reivindica lo "bueno y lindo" que es "que los hermanos se sientan juntos".

Quizás el momento más emotivo, y el que causó la espontaneidad que refleja esta fotografía tan cautivadora, fue cuando en esa mesa se compartió un vino kosher e hicieron todos un lejaim (brindis por la vida).

"Este día jamás podrá ser superado", "todavía no tomamos conciencia de lo que pasó" y "fuimos parte de un encuentro histórico" eran las afirmaciones que repitieron una y otra vez los dirigentes.

Sin duda, este encuentro fue otro de los motivos por los que el Papa argentino sigue marcando precedentes en la vida interconfesional.