JESUCRISTO, REY
Vicky IrigarayHermanos y hermanas, el poder y la autoridad de Jesús es una cuestión que atraviesa todo el Evangelio. No es fácil entender, y menos asumir, un poder y una autoridad que cuestiona nuestro de ser, vivir y hacer. Oremos.
Venga a nosotros tu Reino, Jesús.
• Que nuestra Iglesia por “no ser de éste mundo” esté atenta para tomar distancia de los poderes políticos y económicos, para no buscar el Reino de Dios con diplomacia, poder, dinero…
Venga a nosotros tu Reino, Jesús.
• Que los creyentes promulguemos la dignidad de toda persona humana, sobre todo de aquellas que son maltratadas, humilladas, despojadas de sus derechos y hasta condenadas a morir.
Venga a nosotros tu Reino, Jesús.
• Que todos los que nos hemos reunido hoy convocados por Jesús nos responsabilicemos en la construcción de otro mundo: haciendo crecer el reino de amor, verdad y justicia en nuestras instituciones, en nuestras relaciones, en nuestros barrios y contextos.
Venga a nosotros tu Reino, Jesús.
• Que todas las personas que ostentan cargos de responsabilidad en los gobiernos del mundo y de las instituciones, sientan inclinación y verdadera preocupación por la promoción de toda persona, por la justicia, por la supresión de cualquier tipo de violencia.
Venga a nosotros tu Reino, Jesús.
Padre bueno, que la contemplación de tu hijo despojado, denigrado y maltratado despierte nuestro compromiso con los desfavorecidos de este mundo, trabajando a favor de otro mundo más justo y solidario para toda la humanidad.
Vicky Irigaray