Hermanos y hermanas, el camino de la gratuidad nos resulta extraño; estamos olvidando lo que es vivir gratuitamente y no acertamos ya ni a dar ni a darnos. Oremos.

Jesús, que vivamos con el corazón y la mano tendida

• Por la Iglesia, que su actuar y ser sea siempre desde una actitud de gratuidad y de comunión/solidaridad con el pobre, los excluidos e invisibles de éste mundo.

Jesús, que vivamos con el corazón y la mano tendida

• Por todos los creyentes, que nos sintamos llamados a vivir con la lógica de Jesús, del Reino: compartir nuestros bienes gratis y ocuparnos, acercarnos a los más desfavorecidos de éste mundo.

Jesús, que vivamos con el corazón y la mano tendida

• Por todos nosotros, para que nos sintamos convidados a vivir a contracorriente, como Jesús, sin preocuparnos por recibir reconocimientos u ocupar los primeros puestos.

Jesús, que vivamos con el corazón y la mano tendida

• Por los gobernantes de todos los países, para que realmente se preocupen y ocupen en mejorar la vida de quienes peor viven, siembren paz y concordia entre los pueblos y terminen con las desigualdades e injusticias.

Jesús, que vivamos con el corazón y la mano tendida

• Por todos los que viven con preocupación el inicio de un nuevo curso por falta de trabajo, de salud, de techo, de alimento…que a todos nosotros, aquí reunidos, nos encuentren cerca, solidarios, con nuestros bienes dispuestos a compartir.

Jesús, que vivamos con el corazón y la mano tendida

Padre bueno, concédenos la gracia de vivir des-interesadamente, que la experiencia de sentirnos amados gratuitamente por ti nos convierta por dentro. Te lo pedimos por mediación de tu hijo Jesús, nuestro Hermano y Maestro.

Vicky Irigaray