13º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Vicky IrigarayHermanos y hermanas, esta es la oferta y el reto más apasionante de la Palabra que hoy hemos escuchado: la adhesión a Jesús y su reino es capaz de sanarnos de raíz y darnos la vida en plenitud. Oremos.
Queremos dejarnos curar y ser portadores de salud
• Queremos la sanación de nuestra Iglesia, para que sea cauce de Vida, palabra de liberación, gesto de inclusión, memoria viva del ser y hacer de Jesús de Nazaret.
Queremos dejarnos curar y ser portadores de salud
• Queremos la sanación de nuestras pequeñas comunidades de fe, que sean espacios de vida en fraternidad y sororidad, que favorezcan el sentimiento de pertenencia y la unión en la misión compartida.
Queremos dejarnos curar y ser portadores de salud
• Queremos la sanación para todos los enfermos, que los sanitarios y voluntarios sean delicados con el sufrimiento, practiquen la escucha y la misericordia, tengan siempre una palabra de vida, consuelo y aliento.
Queremos dejarnos curar y ser portadores de salud
• Queremos la sanación de todos los responsables de las instituciones políticas, religiosas y sociales, que trabajen en favor del pueblo, de los que más necesitan, de los invisibles de nuestro mundo.
Queremos dejarnos curar y ser portadores de salud
• Queremos la sanación de nuestro mundo, que todos nos comprometamos con el fin de los campamentos de refugiados y de las travesías mortales por el Mediterráneo, que se terminen las colas del hambre y la violencia en los hogares.
Queremos dejarnos curar y ser portadores de salud
Padre Madre buena, que acertemos a confiar nuestra existencia tras los pasos de tu hijo Jesús, siendo cauces de humanidad y libertad. Te damos las gracias porque nos llamas a la Vida en plenitud.
Vicky Irigaray