23º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Vicky IrigaraySomos la comunidad de Jesús, invitados e invitadas a vivir como hermanos y hermanas en clave de perdón mutuo, servicio gratuito y acogida a los más pequeños de cada comunidad. Oremos.
Queremos ser cauce de bien y unidad
• Necesitamos una Iglesia que hable del perdón como nueva oportunidad ofrecida, como curación de heridas que nos impiden caminar, como vuelta a vivir desde el Amor que realmente somos.
Queremos ser cauce de bien y unidad
• Necesitamos comunidades de fe que sean escuela de fraternidad, con relaciones humanas basadas en la verdad, con trato amable, tratando de comprenderse mutuamente y buscando siempre el bien común.
Queremos ser cauce de bien y unidad
• Necesitamos hombres y mujeres que sean referentes de unidad, que nos motiven a vivir preocupándonos y ocupándonos del otro, en especial de aquellos que más nos necesitan.
Queremos ser cauce de bien y unidad
• Necesitamos, en este inicio del nuevo curso escolar, comunidades educativas comprometidas con el crecimiento personal y académico de nuestros niños y jóvenes.
Queremos ser cauce de bien y unidad
• Necesitamos ser anuncio de lealtad, igualdad, servicio, justicia, concordia y paz en este mundo que tiende a caminar por los derroteros opuestos.
Queremos ser cauce de bien y unidad
Padre Madre buena, que seamos capaces en la Iglesia de recontextualizar el sentido del perdón como camino para ser hermanos y hermanas corresponsables unos de otros.
Vicky Irigaray