Hermanos y hermanas, no es posible el Reino de Dios sin búsqueda, sin compromiso, sin opción personal e intransferible, sin aunar fuerzas, sin remar todos y todas a favor de la fraternidad universal. Oremos.

Queremos ser camino hacía Belén

• Soñamos con una Iglesia profética, capaz de reformularse, lejos del poder, que busque ser Buena Noticia para el mundo de hoy, que proclame, sin añadiduras, el mensaje de Jesús.

Queremos ser camino hacía Belén

• Queremos comunidades parroquiales y religiosas que sean espacios de acogida, de servicio, de implicación social, de compromiso por quienes más los necesitan.

Queremos ser camino hacía Belén

• Necesitamos hombres y mujeres que sean referentes de vida humana y cristiana, que proclamen el gozo de seguir tras las huellas de Jesús, que sean semillas de un mundo nuevo.

Queremos ser camino hacía Belén

• Proclamamos como nuestro único poder el servicio gratuito, las relaciones humanizadoras, una convivencia entre los pueblos en paz, un compartirnos en tiempo y bienes.

Queremos ser camino hacía Belén

• Necesitamos la paz en nuestro mundo, acertar a llegar a acuerdos personales, vecinales, nacionales e internacionales mediante el diálogo, contagiar bien-estar y unidad con nuestras palabras y gestos.

Queremos ser camino hacía Belén

Padre Madre buena, cada día es una nueva ocasión y una nueva posibilidad para hacer crecer entre nosotros el Reino de Dios; que seamos audaces y responsables sembrando Reino.

Vicky Irigaray